Blanca Dina Mejía Cervantes/ Enactus Landívar/ Campus San Luis Gonzaga, S. J. Zacapa
Allá en oriente, donde todos creen que hay pura gente vaquera y armada, la imagen que vende la televisión. La única realidad es que en el oriente sale primero el sol, y antes de que eso ocurra, ya están las amas de casa despiertas desde hace mucho, con el fogón a todo lo que da porque deben preparar los dos tiempos de comida de su esposo “el agricultor” quien, laborioso, todos los días madruga y se va a las parcelas a cuidar sus cosechas. A él no le pueden faltar sus herramientas: su machete corbo, su tecomate con agua y su matate con bastimento. Al llegar el sol a la mitad del cielo, cubierto por las ramas de una ceiba, se dispone a descansar y tomar sus alimentos, recostado sobre su matate, se dice a sí mismo: “las cosechas han estado malas, los tiempos han cambiado y la tierra se está arruinando, malaya los tiempos de mi papá, era buena la cosecha, antes no había tanto químico, y eso es lo que ha venido a arruinar el suelo”, se repite a cada rato el pobre agricultor sudoroso y cansado de trabajar todo el día.
La región de Oriente de Guatemala ha sido la más afectada con el cambio climático según un Informe de Situación Alimentaria y Nutricional en el corredor seco de Centroamérica realizado por Acción Contra el Hambre (2010), las pérdidas afectan especialmente a los pequeños productores de granos básicos. La región oriente de Guatemala, está comprendida por Jutiapa con 389,085 habitantes; Jalapa 242,926; Zacapa 200,167; El Progreso 139,490; y Chiquimula 302,485. En total: 1.274,153 habitantes. En esta región se ubica la Sierra de las Minas que ofrece una de las más espléndidas muestras de ecosistemas selváticos que pueda imaginar, habiendo sido declarada área protegida. La sierra es manejada como el recurso ecoturístico más prominente de Zacapa, contando con aproximadamente 80 kilómetros lineales que le corresponden de cresta de la Sierra de las Minas.
Asimismo, en Zacapa se encuentra ubicado el Campus Regional San Luis Gonzaga de la Universidad Rafael Landívar, centro de estudios superiores que imparte educación jesuita, encaminando a sus estudiantes hacia los principios ignacianos. Dichos principios están basados en la dignidad de la persona humana, en la verdadera libertad y en la igualdad de oportunidades, que permitan al hombre ser sujeto y no objeto de la vida socia. En la necesidad de cambios justos que, eliminando los impedimentos a nivel nacional e internacional, y en los órdenes social, político, religioso, económico y familiar, ayuden a conseguir para el ser humano su desarrollo integral, buscando siempre que logre ser más. A partir de esto se crearon diferentes asociaciones estudiantiles de obras sociales y voluntariados; entre las que fungen en el Campus de Zacapa se encuentra Enactus Landívar; esta es una organización internacional no lucrativa en la que se unen estudiantes académicos y líderes para transformar vidas alrededor del mundo.
No solamente ayuda a transformar vidas sino que también, ayuda a los estudiantes a desarrollar un talento y perspectiva que son esenciales para ser líder.
Enactus Landívar trabaja sobre varios ejes, los principales son:
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Primer eje: Mejorar la calidad de vida de las comunidades vulnerables con las que trabaja, brindando herramientas para incrementar su participación comunitaria, empoderarlos, y así tener resultados positivos que ayuden a su autosostenimiento.
Segundo eje: Capacitar a las comunidades sobre el uso adecuado de sus desechos, concientizándolos sobre su reutilización y los beneficios que se obtienen, fomentando así una cultura de reciclaje.
Tercer eje: Crear policultivos orgánicos, y a partir de la recolección de basura orgánica, elaborar compostas que ayuden a la cosecha de manera económica y libre de químicos, obteniendo así un estado optimo de seguridad alimentaria.
Cuarto eje: A partir de los policultivos orgánicos, capacitar a las comunidades para el procesamiento industrial, manejo adecuado y control de calidad de sus cosechas; incrementando así sus entradas económicas para que tengan ingresos fijos para lograr el bienestar de toda la comunidad y ser autosostenibles con este proyecto a largo plazo.
Quinto eje: Transferir conocimientos con valor, crear e implementar proyectos de potenciación de comunidades. Enactus Landívar no solo transforma la vida de las comunidades priorizadas, sino que ayuda a los estudiantes voluntarios a desarrollar el tipo de talento y perspectiva que son esenciales para el liderazgo en un mundo cada vez más complejo y desafiante.
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Nuestro proyecto a realizar este año 2014 se llama: “Impulsando Comunidades”, este es un proyecto que tiene como objetivo principal mejorar la calidad de vida de los comunitarios de las áreas priorizadas, en las áreas económica, nutricional, social y ambiental a través de una mejora en el tejido social, el manejo adecuado de sus desechos sólidos y la implementación de huertos nutricionales simultáneos a un cultivo orgánico comunitario. La sostenibilidad del proyecto se asegura con el carácter orgánico y organizado del cultivo, un sistema integral y auto sostenible de separación y valoración de los desechos sólidos y principalmente con el empoderamiento de los comunitarios sobre el proyecto.
Historias como la del laborioso agricultor fueron las que originaron este proyecto; porque esas personas de las áreas rurales tienen toda la gana de trabajar pero como ellos mismos dicen: “no viene gente preparada que nos capacite y nos ayude a que nuestras cosechas se logren.”
Y siguiendo el mandamiento número diez del Decálogo Ignaciano que nos dice: Buscar siempre el “Magis” en todo lo que se hace:
“Haz lo que haces, porque nadie más hace, que el que hace una sola cosa”.