Claudia García
Corresponsal
Uno de los torneos más antiguos de selecciones de fútbol a nivel mundial es la Copa América, la cual se juega desde 1916, teniendo como máximos ganadores a las selecciones de Uruguay con quince títulos, Argentina con catorce, Brasil con siete, Paraguay y Perú con dos cada uno y Bolivia y Colombia, quienes la han ganado en una sola ocasión.
La Copa América es un torneo que está conformado por las diez selecciones de la Conmebol y desde el año 1993 invita a dos miembros de la Concacaf a participar en la competencia, en esta ocasión la Copa América se disputó en Argentina y los equipos invitados fueron Costa Rica y México. Ambas selecciones acudieron a la cita con su equipo en categoría sub 22.
En nuestro país fue visible la gran expectativa que genera este torneo, ya que inclusive es fácil encontrar personas seguidoras de los equipos sudamericanos que portan con orgullo la camisola de estos países. El interés que genera este certamen es muy grande y esto se debe en gran medida a la calidad de los jugadores que conforman los diferentes equipos; la mayoría de ellos militantes dentro de los mejores clubes del mundo. Messi (arg) y Alves (bras) en el FC Barcelona, Radamel Falcao (col) en el Porto, Pato (bras) en el AC Milán, Forlán (urg) en el Atlético de Madrid, Higüain (arg) en el Real Madrid, entre otros.
Por todos estos factores durante una Copa América se espera disfrutar de fútbol de gran nivel; sin embargo, en mi opinión, en esta Copa América se esperaba más emoción y más goles de los que pudimos ver. Los llamados a ser protagonistas “Brasil y Argentina”, quedaron fuera de la Copa en la fase de cuartos de final, dejando un mal sabor de boca en sus seguidores. Argentina siendo el país anfitrión y además de contar con Leonel Messi, el mejor jugador del mundo en la actualidad, se esperaba mucho más de ellos. Por el otro lado Brasil, el campeón defensor que cuenta con un muy buen equipo, se quedó sin mostrar su característico “jogo bonito” y sin la oportunidad de repetir la hazaña.
Así como hubo estas grandes decepciones también fuimos testigos de algunas sorpresas, como el buen desempeño de Venezuela que llegó a instancias de semifinales, o Paraguay que logró llegar hasta la gran final frente a Uruguay sin haber ganado ningún encuentro con cinco empates y una derrota.
A la distancia esta fiesta también se vivió en Guatemala, con una amplia cobertura de los medios de comunicación, escritos, radiales y televisivos, además de ofrecer atractivas opciones para los fanáticos que disfrutaron de los partidos desde sus hogares o fuera de ellos. Por todo esto es innegable que el futbol es y seguirá siendo el deporte más popular a nivel mundial.
Esta fiesta llegó a su fin con la coronación en tierras argentinas de los Charruas, (Uruguayos) quienes de manera contundente derrotaron a los Paraguayos por 3-0, adjudicándose su Copa América numero 15 en su historia, siendo el país con más coronas en está competición.