¿Por qué en Guatemala las carreteras tienen un valor muy elevado a comparación de otros países?

Según estudios y estadísticas las carreteras más caras y las que menos tiempo de vida tienen son las de Latinoamérica. La duración de una carretera se ve afectada por la malversación de fondos,  en donde las empresas para tratar de absorber costos y hacerlos parte de la utilidad, utilizando materiales que no cumplen con estándares de calidad, Además, no se cumplen con las normativas para construcción de carreteras. Por otra parte, esto no sería posible sin la complicidad de las autoridades a cargo de los proyectos, que omiten la supervisión de los mismos y presentan buenos informes, a fin de que se demuestre que la construcción de las obras públicas se hace de la mejor manera.

Las carreteras en Europa tienen un costo de dos cientos mil dólares, y en Guatemala las carreteras cuestan dos millones de dólares en promedio, por ejemplo el nuevo trazo de Barberena tuvo un costo de dos cientos cuarenta y seis millones de quetzales para un trayecto de doce kilómetros en total, es decir, en promedio el precio de la carretera fue de más de veinte millones de Quetzales. Es un claro modelo en donde se puede observar la gran diferencia que existe entre la construcción de carreteras en Europa y Guatemala. A diferencia de los países del  otro continente, el de la eterna primavera es un lugar lleno de corrupción, incluso muchas veces los proyectos desde la etapa de preparación y planificación ya han sido adjudicados a una empresa, por supuesto encubriendo al gobierno y con el fin de que al finalizar el proyecto ellos puedan recibir altas cantidades de dinero que hoy en día se desconocen por la población guatemalteca.

Si pensamos en la construcción de carreteras es indiscutible que todas tienen un precio distinto por kilómetro, algunas son más costosas por ser de pavimento rígido, otras porque se debe cambiar la geometría del terreno que incluyen puentes de acero y concreto reforzado altamente costosos, pero esto no acredita a que el precio promedio de una carretera en Guatemala sea casi diez veces más que las de Europa y Estados Unidos.

Uno de los casos más importantes de corrupción es el de la empresa brasileña Odebrecht; en el año 2012 durante el periodo del presidente Otto Pérez Molina fue adjudicada a la constructora una obra por casi cuatrocientos millones de dólares, equivalente a casi tres mil millones de quetzales, una cifra verdaderamente impresionante, el trayecto para construcción era de ciento cuarenta y seis kilómetros, si reiteradamente se calcula el precio promedio por kilómetro de la carretera nuevamente obtenemos más de veinte millones de quetzales. Considerando los precios de las carreteras en Europa; la adjudicación del proyecto CA-2 Occidente no tuvo que haber sido solamente de ciento cuarenta y seis kilómetros, sino de más de mil kilómetros en total. Significa entonces que con esa cantidad de dinero que el Gobierno llamo como un “feliz acuerdo”, se pudo haber construido una carretera nueva desde la Ciudad de Guatemala hasta Flores Peten, y no solamente eso, también una carretera nueva desde la Ciudad capital hasta la Mesilla en Huehuetenango, sin dejar pasar el  mantenimiento que se podría dar a miles de kilómetros que actualmente están en mal estado.

Es increíble como una palabra llamada corrupción puede afectar a millones de personas.

Por corrupción no existen carreteras municipales que llegan a aldeas alejadas, por corrupción no hay mantenimiento adecuado y miles de baches e inconformidades dañan diariamente los automóviles, por corrupción no se da oportunidad a nuevas empresas porque los proyectos mucho antes han sido adjudicados, por corrupción el país posee una gran deficiencia de comunicación internamente y externamente. Por ultimo no se puede dejar de hablar de la corrupción en carreteras sin mencionar el caso “construcción y corrupción”, en donde a menos a diez empresas le fueron adjudicados más de seis millardos de quetzales en proyectos de carreteras. Si elimináramos esa acción, esa circunstancia en donde los funcionarios públicos se corrompen tendríamos unas vías de usos adecuados, reduciríamos en gran porcentaje la desgracia de los accidentes, y además, el gobierno podría invertir mucho más dinero en educación, porque un país sin educación es un país pobre.

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