Martín Berganza / Opinión /
Desde el 25 de abril del año pasado, existen esfuerzos por crear unidad entre los estudiantes de las diversas casas de estudio guatemaltecas. Anteriormente, era la USAC, con la Asociación de Estudiantes Universitarios, que monopolizaba la participación política estudiantil. Desde el conflicto armado hasta estas fechas, la estrategia de represión contrainsurgente dio fruto a que la política universitaria cambiara de tal manera que, los dirigentes como Oliverio Castañeda de León, Luis Fernando Colindres Pérez, Rogelia Cruz Martínez, Irma Flaquer y la generación de dirigentes de 1984 y 1989, fuesen asesinados o desaparecidos.
El resultado de esta represión fue que la política estudiantil se corrompiese a tal punto que la dirigencia de la Asociación estuviese en mano de grupos de poder que se interrelacionan con los mismos grupos que han cooptado la academia universitaria durante los últimos veinticinco años. Por eso mismo, han surgido grupos estudiantiles en la Universidad de San Carlos que intentan reformular la manera de hacer política.
Los estudiantes de las universidades privadas guatemaltecas, históricamente, no tuvieron el peso que tuvo la AEU en la conformación de organización estudiantil. Sin embargo, el 16 de mayo de 2015, cambió esa dinámica al unirse los colectivos de estudiantes universitarios de la Universidad Rafael Landívar, de la Universidad del Valle de Guatemala y de la Universidad Francisco Marroquín, en una sola marcha para exigir la renuncia de Roxana Baldetti. Y los esfuerzos no se han terminado allí, la conformación de la Coordinadora Estudiantil Universitaria de Guatemala, como organización, sigue al día de hoy. Ha sido un proceso lento y de aprendizaje, pues la dinámica deliberativa de la misma no siempre se traduce en acciones concretas.
Pero están allí, intentando romper con la dinámica impuesta tras años de represión y de desorganización.
Por eso mismo, el Foro Estudiantil Internacional “Juventud en Movimiento” se organizó conjuntamente con Nómada, el día 21 de abril a las 18:30 horas en el Paraninfo Universitario en la zona 1, para poder compartir experiencias de los estudiantes organizados de diversos países latinoamericanos. En un momento histórico como este, donde la desigualdad es uno de los mayores problemas para el desarrollo humano de América Latina, donde existe mayor apertura democrática tras años de guerras en nuestros países, y donde las redes sociales facilitan la comunicación pero a la vez la despersonalizan, es de suma importancia compartir las experiencias que han transformado a una generación de estudiantes comprometidos en sus diversas luchas. Promover la participación política estudiantil en espacios abiertos y democráticos es de suma importancia para cambiar la forma de hacer política de una generación entera, que tendrá que ser la que tome las riendas del Estado en sus diversos países, pudiendo así construir un futuro próspero en los mismos.
Quizás sean esperanzas muy utópicas para un encuentro de un día. Pero puede resultar en la semilla de un intercambio permanente entre estudiantes de diversas universidades y de diversos países. No puede ningunearse el hecho que no ha existido una experiencia así para la articulación de estudiantes universitarios guatemaltecos, y que es necesario comenzar con el intercambio de ideas a nivel latinoamericano, para que los estudiantes, y futuros políticos de sus países tengan un intercambio de ideas y experiencias que los ayude y forme. Debemos mantener la esperanza de poder tener un país, y una América Latina con dirigentes de mejor calidad; eso comienza con la formación de sus estudiantes.