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Walfre Serech/Camino Seguro-Safe Passage/

En Guatemala la maternidad temprana afecta el bienestar y la salud de las mujeres jóvenes, así como el ritmo y dirección de un país en donde la escasez de recursos ya es un problema existente.  Para comprender cómo la vida de las jóvenes es marcada  por la maternidad y estimar las consecuencias, es necesario mencionar que para el 2010 se registraron 47,559 partos en adolescentes entre los 10 y 19 años; esto representa el 20 por ciento de todos los partos. Los bajos niveles de educación y las condiciones de pobreza son factores determinantes en la mayoría de los casos de embarazos adolescentes.

La incidencia de la maternidad juvenil debe analizarse como un problema social por el impacto que tiene en el desarrollo de la juventud y la transmisión generacional de la pobreza.

Dar a luz a una edad temprana tiende a reducir la autonomía social y económica de las madres, reduce las posibilidades educativas, pone en riesgo la salud de la madre y el recién nacido; teniendo así consecuencias a largo plazo.  Las posibilidades de salir de la pobreza son casi nulas.

En el país existen políticas de juventud que apenas se ponen en práctica. Es necesaria una actualización en las políticas de salud sexual y reproductiva adolescente para romper este ciclo. Si bien la entidad de brindar educación con acceso libre a la población guatemalteca es el Gobierno, no es un secreto que Guatemala todavía hay muchas personas no tienen acceso a esta. Basta con salir a la calle para ver que muchos niños y niñas trabajan en vez de estudiar porque su situación económica no les permite darse ese lujo.

¿Cómo romper el ciclo?

La única forma de impedir que muchas jóvenes sigan conduciéndose a la maternidad temprana y evitar  que el ciclo de la pobreza se siga transmitiendo de generación en generación, es mediante la evolución mental, la cual se logra solo a través de la educación.  Es imprescindible que cada persona con la posibilidad de superarse educativamente e intelectualmente asuma su responsabilidad humana apoyando a aquellas personas que no tienen la oportunidad de estudiar por cuenta propia.

Generalmente, la educación sigue siendo un sueño casi imposible de alcanzar para las familias de escasos recursos. Y sin embargo es vital para la solución de los diversos problemas sociales que posee Guatemala.

En busca de una mejor educación y por lo tanto de una mejor sociedad, surgen diversas organizaciones como Camino Seguro/Safe Passage, con el fin de romper el ciclo de pobreza mediante la educación. Su misión es brindar una oportunidad a las familias en riesgo que viven alrededor del relleno sanitario de la zona 3.

El voluntariado nos permite alcanzar a una pequeña parte de la población guatemalteca que tanto necesita de educación. Camino Seguro es una oportunidad para mejorar las condiciones de vida de muchas familias en busca de un país mejor. Tú puedes unirte al reto.

Foto de archivo

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