José Rodolfo Ruiz / Corresponsal /
Recientemente (por reciente me refiero al miércoles 14 de marzo) vi un Doodle muy interesante en Google. Para aquellos que no saben qué es un Doodle, es el nombre que recibe el logo de Google en la página, que suele cambiar a diario. Este Doodle despertó mi interés porque al posicionar el cursor sobre el Doodle, no tuve la menor idea de lo que estaba leyendo. El aviso que me apareció leía “101° cumpleaños de Akira Yoshizawa”. Sería mentira decirles que siempre sé de que tratan los Doodles del día, pero lo que sí es cierto es que generalmente “googleo” de qué se tratan.
Después de “googlear” el nombre “Akira Yoshizawa”, y como consecuencia, “wikipeadiar” las mismas palabras, me enteré que Akira Yoshizawa es considerado uno de los padres del origami, también conocido como papiroflexia, ya que fue uno de los japoneses que volvieron un arte este pasatiempo. Algo en particular que captó mi atención, es que este maestro del origami desarrolló su interés a partir de una simple figura hecha con papel periódico que le dio una vecina al visitar a su madre enferma cuando él contaba con tan solo cuatro años de edad. Más adelante, utilizó el origami para enseñar la geometría básica requerida para el trabajo en una fundición, donde laboraba como aprendiz, pero fue hasta en 1937 que decidió dedicarse al origami de forma profesional al exponer públicamente representaciones de papel de todos los animales del zodíaco oriental.
Posteriormente, en marzo de 1998 fue invitado a exhibir sus figuras en el museo de arte de Louvre en París, aunque ya había participado en varias exposiciones anteriormente. El notable maestro Yoshizawa falleció en su 94° cumpleaños, el 14 de marzo del año 2005 en Tokio. Entre sus numerables aportes al arte del origami, está el sistema Yoshizawa-Randell, que es un sistema para diagramar las figuras de la papiroflexia, que es el actualmente utilizado a nivel internacional.
Personalmente, no practico el origami, aunque sí tengo varios amigos que se dedican a éste como un pasatiempo. Debo admitir que ha tenido su utilidad que se dediquen a él porque son muy buenos obsequios para la novia (o el novio en el caso de ellas). Sin embargo, siempre he pensado que el origami es un arte poco apreciado, al menos en nuestro contexto, y muchas veces la vemos como “un juego de niños” porque estamos acostumbrados a ver el origami como esculturas muy simples de papel, aunque en realidad abarque desde los aviones de papel más simples, hasta el plegado del papel para dar formas muy realistas de animales u objetos.
Para aquellos que al igual que yo creían que el origami era un simple juego de niños, es importante hacer notar que la diagramación de las figuras de origami a partir de una hoja de papel plano en dos dimensiones implica el uso de la geometría y la lógica de la simetría a diversos niveles de complejidad. Además, el origami puede tener uso en la psicología y la pedagogía, ya que se ha comprobado que la concentración requerida para una actividad manual ayuda a relajar y estimula al intelecto de tal forma que el paciente se desconecta de sus obsesiones y/o temores. También al ser utilizado como terapia grupal, conlleva a la demostración de sentimientos y conocimientos a través de una comunicación no verbal que resulta muy útil en la rehabilitación de los individuos.
¿Qué piensan ahora del origami? De seguro muchos de ustedes lo sabían ya, pero seguramente muchos de ustedes estaban en la misma situación que yo. Siempre se aprende algo nuevo y siempre es importante aprender algo nuevo. Así es que mi recomendación es que si algún día tienen la oportunidad de visitar una exposición de origami, aprovéchenla. Al menos eso haré yo, porque ahora tengo un nuevo respeto por el arte, así como hace unas pocas semanas cuando encontré respeto por quienes practican Spinning. Ahora practico Spinning casi a diario. Tal vez algún día practique el origami.