pena de muerte

Giovanna Saenz/ Corresponsal/ Opinión/

¿Alguna vez te han asaltado? ¿Te han robado? ¿Has sido víctima de algún tipo de violación? ¿Algún ser querido o familiar tuyo ha sido asesinado? Lo más probable es que hayas respondido que sí a alguna de estas preguntas.  De acuerdo al Ministerio de Gobernación (MINGOB), la violencia homicida en marzo 2013 ascendió a 449 muertes violentas de las cuales el 22% se concentró en el área Metropolitana. La Policía Nacional Civil (PNC) reporta 18% más de homicidios en los primeros cuatro meses del año, en comparación con 2012.

Cada cuatro minutos un guatemalteco es despojado de su teléfono móvil, la mayoría de veces en violentos asaltos.

La violencia que se vive, o mejor dicho, con la que se sobrevive en Guatemala incrementa constantemente. Tanta violencia provoca que las personas se sientan inseguras al caminar por la calle, al transportarse ya sea en servicio público o en vehículo propio, en restaurantes u otros lugares públicos e incluso en sus propias casas con miedo a recibir una llamada de extorsión, a ser asaltados, secuestrados o asesinados.

Generalmente los ciudadanos se quejan de actos violentos diariamente, de las injusticias y de la corrupción; pero únicamente se quedan en opinar y no se preocupan por hacer algo al respecto. Sin embargo, aunque tengan la iniciativa es muy poco probable que logren algún cambio por sí solos; necesitan ayuda de parte del Gobierno siendo este el encargado de velar por la seguridad nacional.

El Gobierno tiene la responsabilidad de hacer todo lo que esté a su alcance para el bienestar del país, en este caso, que la violencia disminuya. Se deben buscar soluciones efectivas y la más factible es aplicar la pena de muerte. Dicha pena se encuentra tipificada en Guatemala, sin embargo, no se encuentra vigente.

Se deben aplicar sanciones rígidas a la gran cantidad de delincuentes que no ha hecho más que perjudicar a la sociedad. Unos cuantos años de cárcel no son suficientes para los que han asaltado, violado, extorsionado, asesinado y demás; porque si lo han hecho tantas veces es muy probable que lo sigan haciendo después de cumplir su condena. Si se acabara con estos criminales habría menos asaltos, robos, violaciones, extorsiones y asesinatos; ese es un hecho.

Los Derechos Humanos velan por la seguridad de las personas; ellos defienden a los delincuentes diciendo que todas las personas, incluso ellos, sin importar lo que hayan realizado, merecen vivir. Es cierto, todas las personas tienen derecho a vivir; pero como dice un dicho popular: “Tus derechos terminan donde comienzan los míos”. Una persona pierde sus derechos en el momento en el que afecta los de otro. Los criminales han afectado los derechos de otras personas cientos de veces, lo más justo es que se haga lo mismo con ellos.

Además de que se haga justicia respecto a los Derechos Humanos, implementar la pena de muerte beneficia a la sociedad porque se acaba con los delincuentes que originan los problemas de violencia. También advierte a otras personas a que mejor lo piensen dos veces, antes de violar los derechos de los demás al cometer crímenes. La pena de muerte es la solución para acabar con la problemática de violencia.

¿Ustedes qué opinan? ¿Están a favor o en contra de la pena de muerte?

Imagen: http://investigaciontipificacion.blogspot.com

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