Pamela Carranza/ Opinión/
Son las tres 3:00 pm y es probable que justamente se te antoje beber una taza de café y ¿por qué no?, puede que ya te la hayas bebido. Si eres uno de estos casos, siéntete sumamente afortunado.
De acuerdo con datos registrados por el Programa Mundial de Alimentos, PMA, (WFP, por sus siglas en inglés), al menos 842 millones de personas viven a diario sin los recursos suficientes como para comer de forma saludable o peor aún, no comen. Esos datos resultan alarmantes, especialmente cuando el hambre es lo que más atenta contra la salud humana, según indica este mismo programa.
En lo que va de 2014, se registra que el hambre ha alcanzado niveles de mortandad superiores al sida, la malaria y la tuberculosis juntas.
UNICEF del Reino Unido entre el año pasado y el presente realizan una campaña llamada Live Below The Line, Vivir Bajo La Línea, que consiste en sobrevivir con poco más de $1 en 5 días, esto para experimentar en cierta forma lo que las víctimas del hambre padecen. La campaña de encuadre social, involucraba a personajes famosos como Hugh Jackman y Tom Hiddleston (conocidos en la gran pantalla como Wolverine y Loki, respectivamente), quienes pretendían generar conciencia respecto al hambre que se vive en países como Guinea en África Occidental, donde infantes se van a diario a la cama sin haber probado ni siquiera un bocado de alimento en todo el día. “Dos millones de niños y niñas mueren cada año por el simple hecho de no tener comida para alimentarse…hay suficiente comida en el mundo para todos”, dice Hiddleston quien se ha convertido en uno de los embajadores de UNICEF, UK.
“El mundo produce lo suficiente para alimentar a toda la población mundial de 7 mil millones de personas. Sin embargo, uno de cada ocho personas en el planeta va a la cama con hambre cada noche”, refuerza la PMA, de las Naciones Unidas, sobre la situación. Existen múltiples razones por las cuales el hambre constituye uno de los principales problemas en países como Somalia y la República Democrática del Congo. Una de estas son los constantes conflictos armados que interrumpen las cosechas en la agricultura, casos como en Siria, que además de hambrunas genera migración hacia otros países.
Otra de las causas es el mal tiempo y clima que desata sequías, como ocurrió en 2011 en los países de Etiopía, Somalia y Kenia; también inundaciones que llevan a perder tierras cultivadas. Centroamérica es una de las regiones que más se ve afectada por depresiones tropicales y en Nicaragua, este año, la PMA en conjunto con el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED), abonaron a la creación de una bodega para almacenar alimentos y granos básicos que estuvieran disponibles para momentos de crisis por desastres naturales. El costo de la bodega fue de $ 95 mil, de los cuales $80 fueron donados por el programa de las Naciones Unidas.
De momento no hay ningún estudio de investigación reciente, respecto a la situación de El Salvador en cuanto al tema del hambre.
De lo último, se destaca el realizado por PMA y CEPAL en 2007, donde se muestra que la desnutrición constituye uno de los problemas de derechos humanos más evidentes en el país. En 2005 era uno de los países con más baja subnutrición en Centroamérica en donde 1 de cada 10 niños menores a cinco años, no tenían las tallas adecuadas para su edad. En la situación de este país, las causas de esta desnutrición responden a la deficiente historia nutricional que ha afectado a la salud, educación y productividad. Mientras que en Latinoamérica 49 millones sufren de subnutrición, según replica la FAO (Food and Agriculture Organization).
Por lo tanto, si hoy se tienen los alimentos para llevarse a la boca, se es muy privilegiado. Con pequeñas acciones se puede contribuir a que en la comunidad, ciudad y país, ya no existan personas que sufran de desnutrición y su vida esté en riesgo. Los gobiernos deberían de organizar mejor sus fondos, donaciones y programas sociales para poder erradicar este tipo de problemáticas en cada país. Es tiempo de replantear las estrategias señoras y señores.