Manuel Pérez/ Opinión/
La jardinería en nuestros tiempos se ha convertido en un tipo de arquitectura; las personas que cuidan nuestros jardines poseen la experiencia necesaria para hacer de ello un ambiente agradable en las instalaciones donde se encuentra el jardín, ya sea una casa, un parque, un edificio o cualquier otro ambiente.
Hace no mucho tiempo, tuve la oportunidad de poder conversar con una persona que trabaja en la Universidad Rafael Landívar, y que su oficio es la jardinería. Esta persona tiene más de 25 años de trabajar para la Universidad en la misma labor; probablemente algunas personas lo conocen o simplemente lo han visto ciudadando algunos de los jardines del Campus Central. Él es Mercedes Gonzáles, jardinero de mucha experiencia, conocedor de cada una de las formas y cuidados que se le debe de brindar a las plantas.
La ardua labor que él realiza cada día se convierte en una arquitectura de la construcción porque el trabajo realizado lo hace en basa a la construcción que posee la Universidad. En la plática sostenida, comenta: -“Mi trabajo lo hago desde hace muchos años y sin embargo aun así no me aburro de cuidar mis plantas, tratarlas como se merecen, haciendo de la parte que estoy encargado un lugar agradable para los estudiantes-.”
Considero que el desempeño que el señor Mercedes realiza es muy bueno, las fotografías que acompaña este artículo fueron tomadas por mi persona para que puedan apreciar el buen trabajo realizado y mis felicitaciones porque pocas personas reconocen el trabajo de los jardineros. Creo que la universidad y el país debería tener un día dedicado a los jardineros, ya que ellos también son personas y hacen de nuestro ambiente un lugar mejor.
Así como ustedes leen mi artículo, me gustaría que también reflexionáramos sobre estas personas quienes además de ser buenos trabajadores, merecen ser reconocidos, no olvidarnos de ellos, ya que son ellos quienes mantienen nuestros patios hermosos y adecuados a nuestro ambiente y a la arquitectura de nuestro lugar.