Mynor Abril 1

Mynor Alonzo / Opinión /

Hace un año era impensable muchas de las cosas que para los jóvenes hoy es común y hasta insuficiente: protestas, plantones, denuncia de delitos y actos de corrupción, foros, debates, cursos de formación; y en todas estas actividades ahora es común ver que se desarrollan en diversidad de género, étnia, estrato, ideología y demás. Pareciera que a muchos se les olvida cuanto se ha avanzado como sociedad con los últimos acontecimientos.

En los últimos meses he leído a muchos analistas comentar sobre el bajón que las movilizaciones y los reclamos sociales han tenido, atreviéndose algunos a decir que todo se quedó a medias, e insinuando que las nuevas generaciones no supimos responder a la coyuntura y necesidades. Sé que su deseo sería que demostremos lo contrario, pero también es importante entender que las condiciones de los jóvenes guatemaltecos de hoy en día respecto a organización son complejas y retadoras. Les aseguro que trabajamos duro y todos los días por estar a la altura.

También observo por la calle y en redes sociales a muchos que parecen impacientes y frustrados, pues perciben que el espíritu se apagó, hablan con nostalgia del pasado inmediato, como si hubieran perdido una guerra.

Es posible que no entiendan que la “guerra” no es contra alguien, sino por la igualdad y la apertura de espacios, y que algunas veces se pelean batallas en las calles; pero la mayoría se pelean dentro de las organizaciones, buscando maneras eficientes de consenso y creación conceptual. Tranquilos, la calle volverá pronto.

Nunca faltan los que empiezan a tocar el tema de la plaza con la simple intención de insinuar un “se los dije”. Por lo regular son quienes menos participan en construir, critican y se adhieren a la que consideran la única ruta posible, sin tomar en cuenta la diversidad de formación y perspectivas con la que se debe trabajar. Agazaparse en el ego que limita la vista debe ser cómodo, pero también es poco útil a las causas.

Me da tranquilidad también toparme en todos lados con cientos de jóvenes y adultos que no están dispuestos a bajar los brazos, que día a día sacan tiempo de sus agendas para intentar construir nuevos modelos de participación y organización, que entienden que las luchas son procesos, y que cada proceso es distinto a los demás. Las rutas aún no están claras, el objetivo sigue siendo el mismo: construir un país mejor en donde todos quepamos.

La coyuntura de 2015 nos abordó con pésimas condiciones organizativas y de formación, éramos una sociedad sin esperanza ni ruta establecida, conocimiento casi nulo de las dinámicas del poder, miedo a participar y denunciar debido a la impunidad pero sobre todo, vivíamos en completa nulidad de incidencia política debido a la atomización y la desconfianza.

Ahora, a un año de la movilización del #25A, sabemos cómo sociedad que podemos incidir, pero para hacerlo más efectivamente debemos dedicar tiempo y paciencia a la construcción de proyectos sólidos. Conformar alianzas tácticas o estratégicas con quienes coinciden en los objetivos es de suma importancia. Por eso aplaudo los esfuerzos que grupos como Justicia Ya promueven con sus actividades de 25A: 1er año.

Solamente no olvidemos que Guatemala no es la primera ni será la última sociedad que atraviesa procesos de cambio, que hay valiosas experiencias que pueden aprenderse de otros países hermanos.

Es por esto que los invito a participar en el foro universitario internacional “Juventud en Movimiento”. El cual contará con la presencia de compañeros estudiantes y activistas de México (#Soy132 y Ayotzinapa), Brasil, España (Podemos) y Honduras (UNAH), así como un abordaje de la experiencia de organización estudiantil universitaria de Guatemala por parte de la CEUG.

El foro se llevará a cabo en las instalaciones del Centro Cultural Universitario (antiguo paraninfo) el jueves 21 de abril, a las 18:30hrs. La entrada será libre y el contenido enriquecedor para la juventud que insiste en soñar y construir un país mejor. Recordemos que la formación es importante para construir procesos sostenibles.

Receta para movimientos sociales: : Organización, formación y calle.

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