Las remesas han aumentado considerablemente en los últimos años, transformándose en una de las fundamentales entradas financieras externas, en varios países en desarrollo, incluyendo a Guatemala. Si bien estos ingresos ayudan a la economía del país, también reflejan las carencias existentes en el país, ocasionado por falta de oportunidades, una emigración masiva en los últimos años.
Según el Banco de Guatemala, las remesas son los envíos de dinero en dólares u otra moneda (en efectivo, cheques, transferencias, etc.), por las personas que emigraron al extranjero, a sus compatriotas de su país de origen. Por ende, reflejan una manera de aumentar las divisas y mejorar el desarrollo local de las comunidades en las que habitan los familiares.
Asimismo, reflejan la conexión que Guatemala posee con Estados Unidos en temas de remesas, dado que al inicio de la pandemia, se vio una disminución de ingresos en el país, especialmente por el aumento de casos en Estados Unidos y por ende, el incremento de pánico y cracks bursátiles, lo que conllevó a la reducción de remesas como un mecanismo de ahorro ante el cese de actividades laborales en varios sectores, logrando un crecimiento sostenido de nuevo, a partir de junio. Sin embargo, Guatemala experimentó un récord al sobrepasar lo recaudado en el 2019, al obtener casi un ocho por ciento más en el 2020.
Por otra parte, las remesas funcionan como un mecanismo de ayuda ante el aumento de desempleo, disminución de la actividad económica y la falta de recaudación fiscal en el país para afrontar y salvaguardar los derechos de los ciudadanos.
Si bien el impacto económico por medio de remesas, en los países, depende de cómo se desembolse el dinero, reflejan un alto porcentaje con respecto al Producto Interno Bruto. Según el Banco Mundial, las remesas pueden llegar a representar un tercio de las entradas, en términos financieros en varios países. Un ejemplo es África, que ha obtenido un crecimiento sostenido, producto de la migración, logrando mitigar ciertos efectos negativos del creciente déficit comercial en algunas regiones. En Guatemala, ayudan a mejorar el déficit de la balanza comercial y se genera mayor dinamismo en la economía, que impulsan la innovación y desarrollo constante.
Solamente en Guatemala, al año 2020, las remesas representaban el 14.6% del PIB, lo que evidencia la dependencia que se posee con el Triángulo Norte y la necesidad de mejoras políticas públicas, que garanticen una mejor cooperación entre los países involucrados.
Históricamente, millones de guatemaltecos se han beneficiado de los ingresos que generan más de un millón de guatemaltecos que radican principalmente en Estados Unidos. Por ende, las remesas en Guatemala ayudan a aumentar el consumo en varios sectores, los cuales pueden llegar a tener un efecto agregado amplificado, si se poseen vínculos con otros sectores.