Katherine Rivera / Opinión

“¿Estoy por salir la universidad y me da miedo el mundo real?

“Ayuda!,  yo he visto que sí tengo conocimientos vastos de mi carrera  pero me da miedo que no me contraten o que no sepa hacer mi trabajo, pues varios amigos dicen que trabajar no es exactamente igual a las actividades que haces en clases.”

 

Hace unos días estaba en la web buscando información sobre temas relacionados con becas, postgrados y maestrías, y me topé con esta pregunta muy inusual  en “YAHOO! Respuestas”. Al principio me causó mucha gracia.  ¿Quién en sus cinco sentidos haría esa pregunta en un foro como ese? Luego de reírme un poco y procesar la pregunta, me di cuenta que me encontraba exactamente en la misma posición.

Siento como si fuera ayer cuando entré a la Universidad con miedo, grandes expectativas y perdiéndome en el Campus todos los días buscando la clase que me tocaba en el mapita que dan el primer día de clases. Muchos me decían, “la universidad es muy difícil”, “el que no deja retrancas en la U es bien pilas”, “vos serás el cambio para el país”… y no terminaría.

Pero a decir verdad, fue difícil, pero no tanto como estar a días de graduarme y no saber qué voy a hacer con mi vida.

Recuerdo que he tenido esta conversación con mi mejor amiga varias veces, nos preguntamos ¿hacia dónde debemos ir?, ¿a qué nos deberíamos de dedicar?, ¿cómo vamos a conseguir trabajo? Porque una realidad evidente de nuestro país es que las oportunidades son escasas, la mayor parte de empresas piden personas graduadas y con mil años de experiencia. Nos vemos sumergidos en una sociedad que entras a un buen puesto por  “cuello” o porque dejaste tirada la Universidad por necesidad y ensanchaste tu experiencia. ¿Pero qué pasa con los que nos dedicamos a estudiar para tener un “mejor futuro”?.

La verdad es que se siente un miedo palpable, un miedo a la realidad. Y vivimos una contradicción, porque ya queremos salir de la Universidad, de ese estrés torturador y de los infinitos desvelos, pero a la vez nos aterra enfrentarnos a la vida laboral, con responsabilidades reales.

Pero este artículo no solo es para hablar de lo difícil que es la vida, sino también para alentarte y darte algunos consejos que recopilé de varias personas. Es importante decir que estos puntos van dirigidos para los que están entrando, tanto para los que están saliendo de su carrera, como es mi caso.

Si estas iniciando:

  1. No le des poca importancia a tu promedio: Muchos catedráticos ponen la mirada en los alumnos con buenas notas, te toman en cuenta en actividades y no sabes si algún día serán tus colegas o quienes te contraten. Aprovecha los cursos que son “fáciles” para sacar las mejores notas y elevar tu promedio, muchas veces los hacemos de menos y aun siendo fáciles sacamos bajas notas. Un buen promedio te ayudará a buscar becas de postgrado en el extranjero.
  2. La experiencia es clave: Busca la forma de ganar experiencia, tal vez no precisamente en un trabajo formal, pueden ser pasantías, ofreciendo tu ayuda en alguna institución u ofreciendo apoyo a algún catedrático. Eso le aportará a tu CV.
  3. Establece buenas relaciones: Sé amable con todos y crea amistades. Somos seres sociales y no sabemos si en algún momento necesitaremos de los demás.
  4. No desprecies el aprendizaje: En las universidades siempre hay diplomados, curso libres, charlas, foros, etc. Muchos de ellos gratuitos y otros a costos razonables. Además de cursos en línea que encuentras en grandes cantidades.

 

Si estás saliendo:

  1. Tener miedo es normal: El miedo bien canalizado nos ayuda a salir de nuestra zona de confort y buscar nuevos horizontes, no dejes que te estanque.
  2. No todos empiezan desde puestos gerenciales: Seguramente sueñas con el mejor trabajo de tu vida al minuto de haber salido de la universidad, pero la realidad no es así, no desprecies los puestos pequeños, pero siempre busca lugares donde puedas crecer.
  3. Informate bien sobre becas de postgrados: Hay muchas universidades que abren sus puertas con becas, no solo en Guatemala sino también en el extranjero. No pierdes nada con intentar, pero sí ganarías mucho si te dieran un sí.
  4. No te sintás apachado por los logros de los demás: Recordá que todos tenemos procesos distintos, alegrate de los triunfos de los demás y pegate más a ellos para aprender y saber lo que podés mejorar. Ya llegará tu momento de triunfo.
  5. Definí lo que querés: No podes querer ser comunicador un día y mañana agrónomo, a menos que esa fusión tuviera un propósito. Al saber lo que querés en realidad, te podés esforzar más en esa área y ser el mejor en lo que hacés.

Recuerden que la universidad solo es parte de un proceso en la vida, no lo es todo, así que vale la pena disfrutar y esforzarse, ya que pasa muy rápido. Al salir, tenemos un mundo por explorar, la vida profesional solo es un área de nosotros, hay otras cosas que también podemos vivir y experimentar.

“No te preocupes por los fracasos, preocúpate por las oportunidades que pierdes cuando ni siquiera lo intentas”.-Jack Canfield.

 Imagen: Unsplash

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